Todo empezó cuando descubrimos que el sueño de Jimena Amarillo era sonar
en Mercadona. Y a partir de aquí fue todo coser y cantar. Bueno, hornear y
cantar. Creamos una playlist para que todo el mundo pudiera hacer la
comprita al ritmo de su música e intentamos que le llegara. Y así fue.

Nos contestó emocionada y, nosotros, mucho más emocionados todavía. Es una
de las artistas que más admiramos porque empezó produciendo en su
habitación y ahora está presentando su último disco “La pena no es cómoda”
en muchísimas salas y festivales de España.
Un proceso que suena muy pero que muy bien.